Tomillo

Fragante y herbal, con grueso sabor amaderado, notas florales e incluso un toque de pino y humo, el resistente tomillo mediterráneo es una hierbita que podría combinar con casi cualquier cosa….

Miembro de la familia de la menta, el tomillo está botánicamente relacionado con hierbas como la menta, la lavanda, la albahaca y el orégano, y toma aspectos de este nutrido árbol genealógico en su perfil de sabor.

Los aceites esenciales timol y el carvacrol son los compuestos responsables del hermoso sabor del Tomillo, compuestos con propiedades antibacterianas y antivirales probadas.

El tomillo combina bien con la mayoría de las carnes y puede aguantar tiempos de cocción prolongados, así que agréguelo a un pollo asado, pavo al horno,  un estofado de carne de vacuno, a un venado de cocción lenta o a una pata de cerdo desmenuzada. Es maravilloso con huevos, así que añádelo a la quiche o frittata.

El tomillo es un sabor característico en la cocina cajún, así que prepara una olla de gumbo o prueba con un poco de jambalaya. Mezcle queso feta con aceitunas, aceite de oliva y tomillo seco y sea una estrella en su próxima cena. Si lo prefieres, ¡también puedes conseguir Tomillo molido!

El tomillo es bastante robusto, así que comience con solo una pizca o dos para no dominar su plato. Cuando el tomillo se seca, su sabor se concentra, así que si está sustituyendo el tomillo seco por fresco, use aproximadamente la mitad de lo que requiere la receta.

Esta planta perenne es originaria de la región del sur del Mediterráneo, el norte de África y Asia, y se ha utilizado durante milenios. Los antiguos egipcios lo usaban como parte de su proceso de embalsamamiento. En Grecia, el tomillo se usaba principalmente por sus cualidades aromáticas; se quemaba como incienso purificador en los templos, y el olor confería coraje a los suplicantes. Los soldados romanos intercambiaban ramitas de tomillo como muestra de respeto antes de la batalla. En tiempos más modernos, el folclore británico de la era victoriana sostenía que los parches de tomillo indicaban la presencia de bailes de hadas, y las niñas pequeñas se agachaban cerca de los parches con la esperanza de ver aparecer un duendecillo.